miércoles, 25 de marzo de 2009
Curso: El traductor editorial
¿Que os creíais? ¿Que esta semana os ibais a librar? Pues no. Todavía faltan unos días para las vacaciones de Semana Santa, jeje.
Bueno, pues a lo nuestro: El pasado lunes el tema era el traductor editorial. La verdad es que pensé que no me interesaría demasiado el asunto porque no creo que nunca me vaya a dedicar a traducir (bastante problema tengo con un sólo idioma). Pero resultó que Joan Trejo, traductor, escritor, filólogo, co-director de la revista literaria Quimera, y profesor de la Universidad Complutense, dio una charla de lo más interesante y amena. Traía la conferencia perfectamente preparada y se le notaban "las tablas" (las de hablar en público, no las de chocolate del estómago, chicas).
Lo más interesante para mí fue darme cuenta de que el traductor no es un mero instrumento que pasa una obra de un idioma a otro, que era lo que yo creía antes, sino que "la recrea", y por tanto tiene que ser un buen lector y un buen escritor. A mi esto me parece un arma de doble filo, porque visto así, el traductor puede mejorar o destrozar una novela...Supongo que se trata de ser lo más fiel posible al original, pero haciéndolo comprensible, en cuanto a giros y expresiones, al idioma final. Como decía Humberto Ecco en un libro en el que habla sobre este tema: "Decir casi lo mismo".
Personalmente prefiero la literatura en español porque sé que estoy leyendo lo que ha escrito el/la aut@r; cuando leo traducciones no puedo estar tan segura de eso. He leído novelas en las que resultaba evidente la "mano negra" de un/a mal traduct@r, pero no es tan obvio cuando mejoran el original.
Para quien pueda interesarle, Joan no reveló lo que cobran los traductores, pero dejó caer que más bien poco (como ocurre, al parecer, con todos los que trabajan en el engranaje editorial).
Bueno, por mi parte creo que empezaré a fijarme en quien es el traductor cuando lea los títulos de crédito de un libro. Es mucho más importante de lo que creía.
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Estoy de acuerdo contigo, he leído muchas novelas extranjeras, y bueno como las que he leído en español algunas me han gustado mucho, pero otras me ha resultado insondables.
ResponderEliminarLuego supongo que los traductores deben de conocer muy bien la lengua desde la que está traduciendo la obra, pues hay muchas palabras que tienen una connotación en el idoma original que luego deben de ser difícil trasladarlo; en nuestro caso al castellano.
Un beso
La pena es que no exista algo similar a lo del cine subtitulado, que en lectura se me hace imposible imaginármelo. Pero el papel del traductor es importantísimo. Hace poco que me terminé Madame Bobary, a mi entender maravillosamente hecho el trabajo de Consuelo Berges (traductora), y sólo me hubiese gustado saber francés para leerme el original. Ahora bien, en español sonaba todo muy bien. El traductor es importantísimo. Tengo una amiga que lo es (español-portugués) y está muy mal pagado, además de ser muy muy difícil encontrar trabajos.
ResponderEliminarBesos guapísima
Yo no quiero librarme de tus fantásticas enseñanzas de este macromundo de las editoriales. Coincido con vos respecto a la interpretación que pueda darle el traductor al texto. Si es como subtitulan algunos films extrangeros, no son de fiar. Pero como en botica, seguramente hay de todo.
ResponderEliminarMe encantan estos posts.
BESOTES
Y es mejor leer a escritores ingleses en inglés. La traducción siempre pierde, dicen, aunque las Memorias de Adriano traducidas por Cortazar, son una joya.
ResponderEliminarEl caso es que no se trata de traducir sólo palabras, sino párrafos. Y no solo eso, sino escenas que con traducción directa no tendría el sentido original.
Se que es difícil desde que conocí a un traductor simultáneo. Hay que saber algo más que idiomas.
Un besote,
Hola, Lolita.
ResponderEliminarOtro capítulo más de tu interesante curso, que agradezco mucho.Lo del traductor, como bien dices, puede mejorar o destrozar una obra.
Anoche vi una película de esas que regalan los domingos algunos periódicos: "El honor de los Prizzi". Estaba en castellano y subtitulada abajo también en castellano.¡A veces no se correspondían las frases!
Si en el mismo idioma no se parecen los diálogos, qué será traducirlo del alemán,inglés o chino.
Enhorabuena por el éxito de tu blog.
Un abrazo.
Pues yo tampoco sé lo que cobran los traductores. Eso sí, tengo una cosa tengo clara un buen traductor no tiene precio.
ResponderEliminarComo bien dices es bastante complicado transcribir las palabras sin perder el sentido que le da el autor original.
Lo normal es que en las traducciones: de libros, películas, da igual, se pierde parte del sentido de la obra.
Un saludo
Halatriste,
ResponderEliminardeben conocer muy bien la lengua de origen y el español, para acertar con la palabra o el giro mas adecuados.
Mon,
sí, parece que en el mundo literario todo está muy mal pagado, pero por lo que estoy viendo en este curso,supongo que es porque ha de implicarse a mucha gente, y claro, hay que pagarles a todos.
Stanley,
en las peliculas tambien debe ser muy dificil traducir los diálogos con el menor número d palabras posible.
Espero que las traducciones de libros sean mucho más fieles al original.
Carlos,
eso es exactamente lo que nos dijo Joan: que hay que traducir por párrafos o escenas completas. Por eso el traductor tiene que ser también un buen escritor.
Besos, niños.
Juan,
ResponderEliminaryo creo que las traducciones en el cine son un mundo aparte.
El éxito del blog te lo debo también a tí, y a tod@s l@s que le dais vida participando en él.
Miguel,
debe ser por eso que les pagan tan mal:como no tienen precio...jajaja.
Saludos a ambos.
tu curso me llena de envidia, sana, claro.
ResponderEliminarEl oficio de traductor es ingrato, diría. Tengo una amiga traductora y dice que es complejo y si encima se engarza en ese mundo editorial...pues eso
Ya lo creo que es importante, Lola, un mal traductor se puede cargar una obra. A mí me ocurre, cuando leo una novela de algún afamado escritor extranjero y me parece que no es de recibo, que le echo la culpa al traductor (por aquello de que si el escritor tiene fama hay que otorgarle el beneficio de la duda). Me pasó, por ejemplo, con "EN EL BLANCO", de Ken Follett. Veía frases mal construídas, redundancias, etc. y pensé que debía ser cosa del traductor.
ResponderEliminarComo siempre, muy buena información.
Besos.
Por eso no soy traductora! ja,ja imagínate que yo haga ese trabajo, pobre escritores!!!!!. besos
ResponderEliminarPrecisamente es un debate que hemos mantenido también en mi curso: la relación autor-traductor, y cuál de ellos es más importante (para mí, el autor, aunque el traductor tiene un trabajo importante). Los giros idiomáticos y el uso correcto de las palabras son muy importantes y no todos aciertan en el sentido que el autor quería dar al texto.
ResponderEliminarEn la poesía, la traducción es mucho más difícil. Yo he tenido dos versiones traducidas en las manos, y una era sublime (y me hizo amar al autor, Tagore), y la otra (si hubiera caído en mis manos primero) me hubiera hecho perderlo.
Me ocurrió lo mismo cuando me hablaron de los traductores. Como tú, tengo problemas con el castellano, asíq ue no te cuento con otros idiomas. Pero claro, te das cuenta de la importancia que tienen, sobretodo cuando se cargan la obra (que es cuando mas se nota y cuando la gente habla de ellos) pero hay ver respetar también la labor que hacen cuando son fieles y lo dejan tal cual.
ResponderEliminarMuy interesante.
Besos!
Didac,
ResponderEliminarpues si parece un trabajo bastante más complejo de lo que imaginaba.
Maribel,
a mi me pasó algo parecido con Memorias de una gueisa; la novela me gustó, pero la traducción me pareció espantosa.
Besos a los dos.
Kuore,
ResponderEliminarnunca se sabe, la vida da muchas vueltas.
Martikka,
si se trata de mayor importancia creo que no cabe discusión: sin autor no hay nada que traducir.
En cuanto a la poesia estoy segura de que debe ser mucho más dificil. Pero estamos en las mismas: si no hay un poeta...
Besos.
Así es, Elena,
ResponderEliminaryo no les prestaba la menor atención, pero creo que a partir de ahora lo haré.
Un beso.
Lola Mariné, clarísima la información y ya casi completo el curso, gracias.
ResponderEliminarSi en prosa el traductor puede acabar con una obra imagínate en el verso.
Ave de las tempestades, líbranos de los malos intérprestes, diría mi tío.
Un abrazo intraducible.
Sergo Astorga
Tema interesante. A veces nos encontramos con traducciones literales que, evidentemente, en español resultan absurdas (aunque sintáctica o gramaticalmente pudieran tener cierta lógica. Así, decir "ferrocarril de vía angosta" en lugar de "vía estrecha". Es lo mismo, pero no es igual). En otras ocasiones, la labor del profesional le da un brillo añadido a la obra (por ejemplo, Berta Vías Mahou para la poesía de Gertrud Kolmar). También es posible que el estilo del escritor sea especialmente difícil de trasladar a otra lengua (pienso en las oraciones de relativo de Kafka, concatenadas una tras otra, que en alemán ya son difíciles, pero en español, o pones un punto y seguido, o te pierdes. ¿Debe el traductor modificar esa estructura original?). Etc, etc.
ResponderEliminarVamos, que lo de "recrear" es una buena definición.
Dianna, cielo,
ResponderEliminarsiento que tengas problemas con el blog. Me paso por el nuevo.
Besos
Sergio,
es cierto, la poesía debe ser mucho más dificil de traducir, por no decir imposible.
Saludos.
Manneling,
ResponderEliminareso fue lo que dijo el traductor:pues no creo que deba modificar la estructura de una obra cuando el autor lo ha querido así, solo intentar hacerla comprensible,lo que en ocasiones debe ser muy dificil.
Saludos
Gracias Lola por tus cálidas palabras a la hora de comentarme.
ResponderEliminarBESOTES
Que tema tan interesante. De hecho, creo que traducir poesía es imposible, más si existe rima. El poema de Poe "El cuervo" no tiene comparación entre su original en inglés y la versión en castellano.
ResponderEliminarEspero que muy pronto mi novela "La búsqueda" sea traducida a otros idiomas, la verdad, no sé cómo saldrá. Y tampoco podría emitir juicio si la leo en inglés que es el idioma que más o menos manejo.
Creo que los traductores tienen que necesariamente ser escritores, de lo contrario sería imposible traducir conceptos con la misma claridad y belleza que la obra original.
Un beso, Lola,
Blanca
Hola Blanquita,
ResponderEliminarde la poesía no hablamos en la conferencia, pero estoy de acuerdo en que es imposible.
Recuerdo haber leído hace años a Walt Whitman, que era un icono en aquellos momentos, y tenía que hacer un gran esfuerzo para captar la profundidad y la belleza de sus palabras, que en español, además de perder toda su musicalidad, supongo que perderían tambien gran parte de su sentido.
Besos.