lunes, 22 de septiembre de 2014

Viaje a Malta (2)

El puerto de La Valleta
¡Qué barbaridad! ¡Cómo pasa el tiempo! Ya hace diez días que volví de Malta y  me parece un recuerdo lejano. Demasiada actividad en Barcelona. Tengo que hacer un esfuerzo para recordar esos días de relax y de sol y ayudarme de las fotos y de la crónica diaria que escribía en mi cuaderno, para recuperar el talante viajero, la mirada curiosa, casi infantil, ante ese mundo nuevo y desconocido que se abre ante nosotros cuando visitamos otro país.

Bueno, que se pare el mundo un ratito y volvamos atrás, al 5 de septiembre, mi primer día en Malta.

Las murallas de entrada a la ciudad

Empecé la jornada tomando un café en el chiringuito de la playa de  Bahar Ic Caghaq, desierta a aquellas horas de la mañana, que sería mi punto de partida y de "recogida" diarios. Por la mañana para desayunar y por las tardes para descansar y contemplar el mar saboreando un vinito blanco del país :) Después, me armé de valor y me metí un autobús atestado de turistas para ir a La Valleta, la capital de Malta.

Calle de La Valleta
Lo primero que llama la atención al llegar a La Valleta son las impresionantes murallas que rodean la ciudad. En seguida te das cuenta de lo pequeña que es: hay dos calles principales que son paralelas: Republic y la del mercado; todo lo demás son callejuelas que suben y bajan, y estés donde estés, al final de la calle siempre se divisa el mar. Por eso, porque es una ciudad tan pequeña y todo parece estar a un paso, caminas y caminas, das vueltas y revueltas y acabas hecha polvo de cansancio :/

Pero vale la pena porque es una ciudad muy agradable, sobre todo, si te alejas de las calles más transitadas. Por la tarde, curiosamente, los turistas casi desaparecen y La Valleta parece una ciudad de provincias.

Lower Barraca Gardens
Visité los jardines Upper y Lower Barraca, ambos con fantásticas vistas del puerto y de "las tres ciudades": Vittoriosa, Senglea y Conspicua, que visitaría otro día; el fuerte St. Elmo, también con increíbles vistas; infinidad  de iglesias (está plagado),  y callejeé hasta la extenuación, que es lo que más me gusta. Me perdí por las tiendas de recuerdos (inevitable) y tomé nota de algunos detallitos que me llevaría para casa.

Ya dispuesta a regresar a casa, me despisté y me encontré en Floriana, que en realidad es otra población, pegada a La Valleta pero mucho más tranquila, y donde pude comprobar que los gatos son tratados como reyes: Les dejan agua y comida por todos los rincones y no sienten el menor temor ante las personas porque se saben respetados y tratados con afecto.

En el Fuerte St. Elmo

Por fin cogí el autobús y para casa, deseando darme una buena ducha y descansar de la jornada de turisteo.

Próxima entrega: Mdina, la antigua capital del país durante la dominación árabe (edad media).




12 comentarios:

  1. Hola Lola... No conozco Malta, pero ya me ha entrado ganas de ir, se respira calma. Dicen que los Griegos le llamaban "Dulce como la miel" debido a la buena miel de las abejas de la isla.
    Espero no te haya picado ninguna, en cualquier caso su picada debe ser dulce como la miel...
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. De mucho gusto, amiga. Gracias por compartírnoslo.

    Abrazo

    ResponderEliminar
  3. Hola Llorenç,
    no he visto ni una abeja, jeje, pero sí, el nombre hace referencia a la miel.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. Hola José,
    gracias por tu visita.
    Saludos

    ResponderEliminar
  5. Callejear es lo mejor del mundo. Y si te pierdes hasta puede ser mejor aún.
    Espero impaciente mas.

    ResponderEliminar
  6. Es verdad, Uno,
    me he metido en cada sitio en mis viajes... pero eso es lo más divertido :)
    Besos

    ResponderEliminar
  7. Huy, leí esta segunda crónica de tu viaje y creía que había dejado comentario. Se ve una ciudad tranquila y muy luminosa. Lo cierto es que me encantan las islas. Imprimen carácter. Seguro que te has traído ideas para una nueva novela, ¿verdad?

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Hola Lola.

    Me encanta tu descripción de tu viaje por Malta. Gracias por compartir tus experiencias.

    Es genial

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  9. Maribel,
    a mí también me encantan las islas. Tienen algo especial.

    Y en cuanto a ideas... todas nuestras vivencias son ideas que en algún momento nos serán de utilidad.

    ResponderEliminar
  10. Hola Monica,
    las gracias os las doy yo por leerme.
    Para mí es como revivir el viaje y eso me encanta.

    ResponderEliminar
  11. Hola Lola, yo también estuve en Malta este verano. Ver tus fotos y tus descripciones me ha rememorado.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  12. Hola Maria José, bienvenida.
    Pues si estuviste en verano todavía pasarías más calor que yo, jeje...
    Pero ¿a que es un país maravilloso?
    Saludos!

    ResponderEliminar

¿Y tú qué opinas?