El mercader, de Coia Valls, nos traslada a la Barcelona del siglo XIV de la mano de Jaume Miravall, el protagonista de una historia trepidante, llena de aventuras y viajes exóticos en la que compartiremos su lucha y la de su familia, a lo largo de más de treinta años, por progresar y salir adelante en un momento en el que Barcelona era tierra de oportunidades, pero también una ciudad dura, donde la traición, la enfermedad y la muerte eran enemigos cotidianos a los que enfrentarse.
Una novela entretenida y amena que se lee con gusto y mantiene el interés hasta el final, con ese trasfondo histórico que tanto nos gusta a muchos.
La herencia de Jerusalén, de Josep Capsir, también tiene una base histórica; en este caso, ¡con la Iglesia hemos topado!, con un incunable que llevará a los protagonistas a una compleja investigación y con el interés de algunos porque no salgan a la luz ciertos aspectos de la vida de Jesucristo que se han ocultado con celo durante siglos.
Todos estos ingredientes nos garantizan horas de entretenimiento y nos harán cuestionarnos algunos aspectos de "la historia oficial".
Una novela no recomendable para todos los públicos, me atrevería a decir, pero que me entretuvo, me divirtió y me dejó un buen recuerdo.
Qué bien vienen estas sugerencias. Me quedo con La conjura... que leí hace una eternidad y de la que guardo el recuerdo de que me encantó pero poco mas. Tiempo de releer. Y El mercader me puede gustar por el escenario y la época.
ResponderEliminarGracias. Un abrazo
Bien reseñas, amiga. Gracias por compartírnoslo.
ResponderEliminarBeso
Uno,
ResponderEliminarlo pasé bien leyendo la conjura, el prota es tan repugnante que da risa.
Besos
Gracias, José,
ResponderEliminarespero que mis reseñas te sean de utilidad.
Saludos!