La gran mayoría de los jóvenes lo tienen claro: han nacido con las nuevas tecnologías y lo aceptan con naturalidad, pero también los hay que se resisten, como mi propio hijo, sin ir más lejos, que a sus 24 años prefiere un buen "libraco", como él dice.
Para los de mi generación, que crecimos con la magia del papel, que recibíamos libros de regalo en vistosos envoltorios y los abríamos con nerviosismo, deseosos de sumergirnos entre sus páginas, la cosa está más clara, pero tampoco tanto.
Yo misma leo preferentemente en ebook. Llevo en mi móvil un montón de libros que no pesan, no ocupan espacio en la maleta cuando viajo, y además son supereconómicos. Pero de repente voy a la biblioteca y no me resisto a la tentación de llevarme el "libraco" que estoy leyendo. Su peso en mi mano me produce una agradable sensación (900 páginas, nada menos), me siento acompañada por "un amigo", ese que nunca te abandona, que te consuela cuando estás triste, que te distrae de tus problemas.
Me diréis que el ebook cumple la misma función. Hummm...no estoy tan segura. Quizá con el tiempo nos habituemos. Pero creo que la nostalgia, los recuerdos de la infancia tienen un peso importante. La magia de abrir un libro, de pasar páginas...
¡Feliz semana!
Yo también prefiero el papel pero hay que reconocerle su utilidad al libro electrónico. Yo, por ejemplo, lo estoy usando mucho ahora que estoy en Chile y que no podía traer mi biblioteca conmigo. Es una forma de seguir leyendo. Además para viajar es muy práctico, cómodo y liviano. Vamos todo ventajas. Sin embargo cuando se trata de leer sentada en el sillón de casa, en el silencio del hogar y con varias horas por delante no tengo duda. Para esos momentos, siempre el papel.
ResponderEliminarBesos!
Es una discusión que durará su tiempo, amiga. Claro, al final se impondrá la técnica. Prefiero el libro físico; no soporte leer mucho en sostén electrónico.
ResponderEliminarBeso
Yo tengo la edad de tu hijo y era de los que se resistía al libro electrónico, hasta que tuve uno.
ResponderEliminarEn un aparatito que pesa menos de 200gr., se pueden tener los libros que uno no llegaría a leerse en una vida entera. Y como si fuera poco, las obras se consiguen a precios muchísimo más bajos que en papel y desde cualquier parte del mundo, sin contar que todas aquellas que están liberadas de derechos de autor, como la mayoría de los grandes clásicos, se obtienen gratuitamente.
Otra de las ventajas que le encuentro al libro electrónico respecto al de papel, es que cuando uno tiene un libro entre las manos, a veces está pendiente de cuántas páginas leyó y cuántas le faltan, cuando en el libro electrónico, a pesar de que el número de páginas figura en pantalla, eso no sucede de la misma forma, ya que es como leer de la computadora: uno termina leyendo decenas de libros, sin siquiera darse cuenta.
Para mí, tarde o temprano va a imponerse el libro electrónico, a pesar de la magia del papel.
Un abrazo, Lola.
TEndría un dilema. A mi me gustan todos.... ;) , cada cosa tiene su función y su momento. Como me muevo mucho el E-book me parece de lo más interesante. Bs.
ResponderEliminarYo los compagino. Tengo libros en e-book desde los primeros que salieron, también en el móvil, peeeero desde hace unos meses he vuelto al papel preferentemente. Seguiré alternando, pero el libro, el físico, sigue siendo especial: está más cerca de nuestros sentidos (olor, tacto) y eso no tiene igual.
ResponderEliminarSaludos!
Te veo como una niña ante la pregunta a quien quieres mas, ¿a papá o a mamá?
ResponderEliminarYo de momento no practico mas que la lectura en papel y no me atrae nada el e-book. Una cosa si que me hace pensármelo: el espacio que ganaría en casa. Hace tiempo que solo conservo libros muy, muy especiales.
Un abrazo
Pues yo igual que tú, Lola. Para viajar el ebook me va perfecto, pero ahora que llevo una semana en casa y estaré al menos unos meses sin moverme, vuelvo al papel. Ayer precisamente saqué también un libraco de la biblioteca. Aunque en mi caso sigo leyendo en papel porque no encuentro en digital todo lo que quiero, y si sí lo encuentro, es a un precio que no me parece justo. Por eso, como no soy de conservar libros más que en mi cabeza, recurro a la biblioteca, que es gratis. Ese de Almudena Grandes, por cierto, lo leí hace unos cuatro años y me gustó, como muchos otros de los suyos, pero está lleno de laísmos y eso me chirría mucho. ¡Que lo disfrutes! Un abrazo.
ResponderEliminarNarayani,
ResponderEliminarestamos de acuerdo.
Coger un libro y acomodarse pasando páginas siempre es un placer.
Besos
José,
ResponderEliminarsupongo que sí, que al final se impondrá el ebook, pero nosotros todavía podremos disfrutar del papel.
Saludos
Jorge Angel,
ResponderEliminar¡no sabía que eras tan joven!
Bueno, precisamente una de las cosas que encuentro a faltar en el ebook es saber por que pagina voy, jeje.
Saludos!
emejota,
ResponderEliminareso creo yo, que cada cosa tiene su momento y su función.
Pero sigo pensando que el papel tiene un encanto especial.
Besos
Martikka,
ResponderEliminar¡cuanto tiempo!
Sí, el ebook nunca será lo mismo que el papel, pero es lo que hay.
Besos
Uno,
ResponderEliminarde todas formas ¿cómo decorariamos las paredes si no tuvieramos libros en papel? jeje.
Besos
Carmen,
ResponderEliminara mi me pasa lo mismo que a ti con los laismos, ¡jajaja! no entiendo cómo la editorial no se los corrige.
Besos, guapa!