Esta frase, vista así, sin puntuación, resulta algo confusa. Sin embargo, con solo ponerle una coma en el lugar que consideremos más adecuado, cambia de sentido totalmente.
¿Dónde la pondría un hombre?
Tal vez así: "Si el hombre supiera realmente el valor que tiene, la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda".
¿Y dónde la pondría una mujer?
¿Alguien lo duda?: "Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer, andaría a cuatro patas en su búsqueda".
Como podéis ver, la coma marca la diferencia.
La puntuación es el tema que vamos a tratar la semana que viene en el Taller de Escritura Creativa, y mientras lo preparaba, me he topado con esta frase y algunas más igual de curiosas y divertidas.
Así que, ¡ojito a la coma! y feliz fide.
Es curioso, hace unas semanas tambien yo hablé en mi blog de la importancia de la coma y puse el mismo ejemplo que tú nos has traído. Sí que es importante la coma, y mucho.
ResponderEliminarUn abrazo.
No le damos importancia a este signo, y como dices puede cambiar la frase. Buena lección. besitos.
ResponderEliminarYo miré este tema, también gracias a tu blog, Lola, en la entrada: Perdón imposible.
ResponderEliminarInteresante, muy interesanta.
Si que es bien importante en muchas frases, tanto que, si te la comes, dice algo muy distinto.
ResponderEliminarEstupendo el ejemplo, Lola, claro, sencillo y evidente. Con él, nos damos cuenta de esa importancia de la patita de mosca.
Un abrazo.
Vaya! Qué casualidad, Mercedes.
ResponderEliminarYo lo encontré por Internet mientras preparaba el tema y me pareció divertido.
Besos
Montse,
ResponderEliminarpues hay que darle importancia porque la tiene ¡y mucha! ya ves.
Besos
Es verdad, Jesvel,
ResponderEliminaros comenté ese libro cuando hacía el curso de Mercedes Abad.
Tambien se lo recomiendo a mis alumnos ahora.
Saludos
Hola Isabel,
ResponderEliminar¡que te voy a contar a ti!
A veces, no usarla o hacerlo mal, lleva a que una frase sea incomprensible y que cambie su significado.
En ocasiones el resultado da risa, jeje.
Besos
Esto me recuerda que hace muchos años, leí en "Composición" un viejo libro de Joaquin Añorga, un ejemplo parecido, pero en ese caso eran cuatro herederos que debían poner los signos de puntuación a la carta dejada por el difunto para saber quien debía heredar la fortuna... Imagínate, cada uno corrigió a su conveniencia. También ese ejemplo, si lo encuentras, claro, te puede ayudar mucho...
ResponderEliminargracias por tus palabras
Abrazos
Muy bueno!
ResponderEliminarBesosssss
¡Qué dificil y qué arte el de colocar bien las comas! Esa frase la conocía. Es un ejemplo magnífico!
ResponderEliminarBesos
EXCELENTE EJERCICIO. MUCHAS GRACIAS POR COMPARTIR.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Siempre lo he tenido muy presente desde que me lo contaron en un taller literario....El ejemplo que has puesto no lo conocía y es genial...Besitos Lola y buen domingo
ResponderEliminarHola Vicsabelle,
ResponderEliminarno conozco ese texto. ¿Sabes como se situla?
Un beso, guapa.
Cantares,
ResponderEliminarun beso, preciosa.
Espero que estés pasando un feliz domingo.
Jo,
es dificil, pero hay que tener mucho cuidado. Si no, ya ves lo que puede pasar, jeje.
Besos
Reltih,
ResponderEliminarsiempre un placer para mi compartir con vosotros.
Saludos
Winnie,
a veces resulta dificil saber dónde colocar la coma, otras, cae por su peso.
Besos
Absolutamente, Lola. La puntuación marca el sentido. Y sin embargo cada escritor tiene su particular estilo a la hora de construir oraciones y párrafos.
ResponderEliminarSe me suelen venir a la mente dos escritores que me cautivan. Por un lado Saramago, con sus largos (casi interminables) párrafos, donde rara vez aparece un punto y seguido; y en contrapartida Galeano, con sus oraciones cortas, precisas, e inundadas al mismo tiempos de comas, que ayudan a darles forma.
Un abrazo!
Muy bueno Lola. Beso con coma, hasta la próxima entrada.
ResponderEliminarAcabo de dejarte el texto en tu correo. Disfrutalo!!!
ResponderEliminarAlejandro,
ResponderEliminarlo que hacen Saramago o Galeano (o cualquier otro escritor) es cuestión de estilo y no afecta al sentido de las frases.
Otra cosa es colocar mál las comas o no ponerlas cuando son necesarias.
Saludos!
emejota,
ResponderEliminarun saludo para ti tambien.
BEsos
Vicsabelle,
gracias, guapa. Voy a leerlo.
besos
Tendemos a minimizar la coma, a utilizar en demasía el punto sustituyéndola, y como en el buen ejemplo que pones demuestra una importancia crucial.
ResponderEliminarAhora que, si la coma está olvidada, ¿qué me dices del pobre punto y coma? Je, je.
Un abrazo.
Hola Lola, hay que ver lo que hace una rayita de ná jejeje.
ResponderEliminarBesos
Jesus,
ResponderEliminartienes mucha razón: el punto y coma es el más olvidado, pero tengo que decir que yo lo uso mucho;)
Saludos
Abi,
ResponderEliminarpues ya ves lo importante que puede ser.
Saludos!
Por supuesto, una coma puede cambiar el sentido de una frase. Pero esta frase debería seguir confusa y sin coma.
ResponderEliminarUn saludo.
Juan Antonio,
ResponderEliminarpues sí, para evitar suspicacias, mejor la dejamos sin coma.
Saludos
Yo directamente he leído la frase como corresponde, es decir, como mujer. Ni se me ha ocurrido pensar que la coma pudiera estar en otro sitio, jeje.
ResponderEliminarUn abrazo.
Maribel,
ResponderEliminartú si que sabes, jajaja!
besos
En estos tiempos no se presta demasiada atención a los signos de puntuación (y a las faltas de ortografia incluso) y yo recuerdo en cambio, que cuando yo iba al colegio a esto se le daba mucha importancia y nos ponian notas de ortografia, caligrafia ¡e incluso de puntualidad! ahora con tantos sms, el lenguaje se ha empobrecido demasiado y es una pena. Un besazo Lola y que tengas un gran fin de semana,
ResponderEliminarHola Lola!
ResponderEliminarMe encanta que honrremos el lenguaje, que es tan bello y completo. Siempre recomiendo a mis amigos tener una diccionario a mano (y si es posible uno de sinónimos también!), enrriquecer nuestra forma de hablar creo que ayuda mucho para hacernos entender en todos los órdenes de la vida...
SALUDOS!
Hola Nieves,
ResponderEliminares preocupante esa tendencia a reducir el lenguaje al mínimo que tienen los jovenes.
La esperanza está en la lectura.
Besos
Gus,
ResponderEliminarenriquecer nuestro conocimiento del lenguaje es una forma de disfrutar de él, sobre todo para los escritores.
El diccionario de la lengua y de sinónimos son imprescindibles!
besos
esa coma lo cambia todo, que increíble.
ResponderEliminarYa ves, David, jeje.
ResponderEliminarJAAAAA, ¡Hola Lola!
ResponderEliminarEstoy de vacaciones blogueras, porque llegó un momento que mi cuerpo dijo basta, y tuve que dejar de hacer algunas cosas. En unos meses, creo, volveré.
Puestos a elegir, yo creo que la más real es el lugar dónde la mujer elegiría, ¿no?
;)
Y además, los signos nos sirven para mostrar sentimientos através de los emoticonos.
¡Un abrazo!
Hola Miguel,
ResponderEliminarpues nada, tu tranqui, que nadie te paga por bloguear ;)
Muchos besos